Lo que más se disfruta no es en realidad el vino o los licores en él, es el surtido delicioso de la fruta que se coló en cada vaso. Lo refrescante que es para disfrutar y saborear en un día caluroso.
Hay miles de recetas de sangría, cada una usando una combinación diferente de vino y fruta, así que no me preocupé demasiado acerca de si este es "auténtico". Para la fruta, me gusta utilizar la amplia oferta de cítricos en los mercados locales - rodajas finas de naranjas, limones, limas- además de una manzana crocante. También puedes probar las frutas como las fresas, piña o uvas. Cuando se remojan durante varias horas, los frutos, tanto el sabor como la consistencia se tornan "gruesos" y jugosos. Ellos no sólo son bonitos en el vaso, pero son una delicia para comer.
Sangría sin alcohol
(Rinde 8 porciones)
2 tazas de agua hirviendo
2 bolsas de té negro (ó 2 cucharaditas de té de hojas sueltas en una infusión)
2 palitos de canela
1/2 taza de azúcar mascabado
3 tazas de jugo de granada
1 taza de zumo de naranja
1 naranja, cortada en rodajas finas
1 limón, cortado en rodajas finas
1 lima, cortada en rodajas finas
1 manzana, sin corazón y cortadas en trozos de 3 a 5 cms.
3 tazas de agua con gas
Verter agua hirviendo sobre las bolsas de té y canela en rama y dejar reposar durante 5 minutos. Deseche las bolsas de té y agregua el azúcar hasta que se disuelva.
En un frasco grande o jarra, combina el té, la canela, el jugo de granada, jugo de naranja, las rodajas de naranja, limón, lima y manzana. Refrigerar por lo menos 1 hora y durante la noche preferiblemente.
Justo antes de servir, agregua el agua con gas. Servir en vasos con hielo.
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